La apertura de la fosa se produjo en el año 2006, todo el proceso partió de una carta anónima que rememoraba unos hechos dramáticos ocurridos en Fontanosas en julio de 1941. El autor de la carta había estado en el pelotón de fusilamiento que segó la vida de siete pobres campesinos. La carta fue acicate para iniciar la exhumación y posterior reinhumación de los fusilados y a partir de esto, para realizar no sólo investigaciones forenses, etnográficas e históricas sino también literarias, ensayos fotográficos, periodísticos y políticos.

El proceso de exhumación de los fusilados en Fontanosas en 1941, las investigaciones forenses de laboratorio, las investigaciones etnográficas e históricas así como la difusión de los resultados de la investigación y actos de reinhumación fueron posibles gracias a diferentes ayudas. El Ministerio de la Presidencia otorgó una ayuda para las labores de exhumación e identificación de las víctimas. Por su parte, la Delegación del Gobierno de Castilla-La Mancha en Ciudad Real colaboró en los gastos derivados del proceso de reinhumación. La Diputación Provincial de Ciudad Real apoyó la difusión de la investigación financiando la publicación del libro Fontanosas. Memoria de carne y hueso (López García y Ferrándiz, 2010). A través de él se puede seguir de manera detallada todo el proceso de investigación previo a la exhumación, así como cada uno de los pasos asociados con la misma.

Más información en  Todas las fosas de posguerra en Ciudad Real