La Solana
- Lugar: cementerio municipal
- Geolocalización: 38.952241, -3.226169
- Víctimas: 39 personas Más información
- Estado: Exhumación parcial / Reconversión en memorial
- Historia:
La fosa de La Solana se abre el día 10 de abril de 1939 con el asesinato de una persona de la que aún hoy desconocemos su nombre, solo sabemos que era conocido como “Tío Palomo”. Una semana después, el día 17 de abril, la cifra de enterramientos es sobrecogedora. Ese día son enterradas en esa fosa 34 personas asesinadas extrajudicialmente. Será día que mayor número de víctimas de la represión se registren en el pueblo. Aunque en el registro se señala una única fecha, es posible que los asesinatos se cometieran antes, según fuentes orales.
Tras estos primeros días de espanto, la fosa continuará acogiendo cuerpos varios años después con el asesinato de algunos guerrilleros. El primero de ellos fue Victoriano Márquez Naranjo (a) “El Curilla”, asesinado el 24 de julio de 1942.
La fosa sigue, unos meses después, con el asesinato de José Jiménez Sánchez. En el archivo municipal de La Solana se encuentra un documento fechado en 1940 donde se señala que el ayuntamiento recibe una fotografía de José Jiménez Sánchez «“Beato”, para que se exponga al público por espacio de tres días, con el fin de que si es visto se le pueda denunciar, por ser un huido». Dos años después de esa inscripción, el 11 de noviembre de 1942, José Jiménez moriría a manos de un guarda y sería enterrado en el cementerio municipal de La Solana.
Los últimos cuerpos que contendría la fosa del cementerio de La Solana, fueron los de Vicente Cañadas del Olmo y José María Fernández del Olmo, ambos pertenecientes a la partida guerrillera de “Los Chuchas”. Los hermanos Leos, según declararon a un vecino de La Solana, mataron a navajazos a los últimos integrantes de la partida cuando los guerrilleros intentaban quitarles las mulas.
Durante los años ochenta se comenzó a exhumar la zona donde estaban los 35 asesinados en abril de 1939, pero se decidió dejar los restos allí y construir en ese mismo lugar un panteón. Los cuerpos de José Jiménez y de Victoriano Márquez fueron exhumados por sus familiares ya en democracia. Hasta la fecha se desconoce el lugar exacto del cementerio donde fueron enterrados los cuerpos de Vicente Cañadas y Antonio Fernández.
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